Este es mi borrador virtual. Todos los textos son de mi exclusiva autoría. No siguen ninguna línea específica ni hilo conductor, ni siquiera una cronología. Publico compulsivamente cuando tengo ganas, y cuando no las tengo me pregunto por qué pierdo el tiempo en hacerlo. Soy así. Las imágenes fueron tomadas de Internet.
martes, 17 de febrero de 2015
Tu peor castigo será darte cuenta
De que contabas con todos los ingredientes para
conseguir la tan ansiada plenitud y no los mezclaste adecuadamente. De que
estaba todo dado para que fueras feliz y no lo supiste aprovechar. Y eso te
pasó por creerle a alguien que lo único que hace es venderle ilusiones al
viento en desmedro de aquello que recibías habitualmente y que considerabas
como migajas de un querer. Tal vez en cierta manera tenías razón, eran solo
migajas, pero migajas sinceras de pasión, de amor; y no todo un cúmulo
rebosante de pasiones ficticias y quereres falsos. Abundan y ya casi son plaga
—ayudados por las facilidades que ofrecen los medios de comunicación que
existen hoy día— los comerciantes de ilusiones, los vendedores de humo que
te ofrecen la luna y las estrellas, y a Marte también. Te hablan lindo, te
escriben mejor, son cancheros, te hacen entender que lo saben todo, te crean
dependencia y sobre todo, te hacen creer que al lado de ellos estarás por
siempre segura y serás valorada como corresponde. Tal vez así sea, pero el
problema es que convencen de igual forma a todas aquellas que se presten al
juego y que ellos puedan atender al mismo tiempo. Y no les importa perderte,
eres un número, siempre habrá quién te reemplace, ellos jamás se involucran
como tú lo haces. Entonces cuando te das cuenta del engaño te caes a pedazos,
quedas hecha una piltrafa, eres un despojo humano sumido en la depresión y la
incertidumbre. Y te costará horrores salir, recuperarte, y volver a creer en
alguien, puesto que desconfiarás hasta de tu propia sombra. No obstante, ten
cuidado, no estás libre de volver a caer, ellos son muy hábiles y ya sabemos
que el amor es ciego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario